Eban
“¡ESTOY
ASUSTADA!”, casi me grita del otro lado del teléfono como respuesta a mi “¿Cómo
estás?”. “Me están aconsejando que empiece a comprar mucha comida, que llene
las alacenas y la heladera, porque falta muy poco para que no pueda salir más. ¡TENGO
MIEDO!”.
No, no se vayan a
creer que la pobre está con arresto domiciliario…Sólo está transitando el
octavo mes de su embarazo.
Así que respiro
hondo, cuento hasta diez, digo ommm, y de todas maneras no consigo sacarme el
enojo de encima. Por favor… ¡¡¡Dejen de asustar así a mi amiga y a todas las
embarazadas!!!
Dejen de
hacerles creer que la vida se termina, que no van a poder salir más, que no van a
volver a dormir nunca… Dejen de advertirles que se preparen para una especie de catástrofe.
Simplemente
se necesita un poco de tiempo y de paciencia para encontrar un nuevo modo de
poder seguir haciendo las cosas de
siempre. Porque todas, absolutamente todas, más tarde o más temprano, terminamos
encontrando la manera…
Aunque durante
un tiempo vayamos al baño con la puerta abierta, nos vistamos con ropa casi
siempre manchada, carguemos con millones de bártulos y andemos cansadas y medias
zombies, poco a poco todo empieza a volver a la normalidad. A esta nueva normalidad.
“¡Relajáte!”,
es lo único que se me ocurre decirle.
Ay, si
supiera lo caóticamente hermosa en que está por volverse su vida…
.
Hola, Qué linda entrada!! Me recuerda el miedo que sentía cuando estaba por nacer mi niñita (hoy ya está por cumplir tres años). Yo trataba de alejar esos miedos leyendo y leyendo: libros para embarazadas, libros para madres, revistas, blogs, etc. Cómo si necesitara llenarme de tips de cómo actuar ante cada cosa nueva que se me fuera a presentar. Y la verdad que tanta lectura no era necesaria: creo que las mamás (y los papás, claro) traemos una inteligencia natural, ¿instinto?, que nos guía para conocer a ese ser que en principio asusta porque depende 100% de nosotros, pero que día a día nos enseñan a ser padres y no es todo taaaan tremendo cómo uno imaginó. Es mágico, agotador de a ratos, emocionante muuuuy (recuerdo mirarla y llorar de emoción, no poder creer tanta felicidad junta). Así que tu consejo: “¡Relajáte!” me parece la mejor frase para decirle a una futura mamá!!!!
ResponderEliminarQué lindo comentario! Yo también creo que hay una especie de instinto, o como quiera que se llame, que hace que nos iluminemos y sepamos cómo actuar.
EliminarY recuerdo perfectamente ese sentimiento del que hablas, mirarlas y sentir esa mezcla de emocion y de felicidad juntas.
Gracias por tu valioso aporte para ayudar a sacarles el miedo a las futuras mamás!!
Besotes.
Siiiii! Gracias por tus palabras
ResponderEliminar