9 de abril de 2012

"PRIMERIZA"

                                                                                                                                Evangelina Prieto


Estaba sentada en la mesa de al lado del mismo bar, muy concentrada en su pequeño bebé. Tanto, que ni siquiera había reparado en mí, que la observaba.

Y al descubrirme, se puso a hablarme, como si intentara disculparse por algo.

“Es chiquito, tiene tres meses”, me dijo. “Me agarró grande. Yo ya tengo 46. Me agarró grande y experimentada. A esta edad ya viviste de todo. Pero también me agarró más miedosa. Cuando sos joven, te llevás el mundo por delante, no pensás tanto. Sos más inconsciente, y a veces eso es bueno. Hacés las cosas sin pensarlo dos veces. Y tenés más energía, también. El cuerpo te acompaña más. Pero yo estoy muerta de ganas. El me rejuvenece, él hace que quiera seguir aprendiendo cosas. A la noche me quedo horas mirando los canales de cocina. No sé cocinar, pero quiero aprender… para él, para que pueda cocinarle cosas ricas. Aprovecho que es chiquito y que tengo tiempo por delante, y aprendo”…

Y algo la hizo volver. El bebé se durmió, y ella lo acostó en el cochecito. “Perdón, te hago perder tiempo contándote esto, que ni debe interesarte”…

Y a mí sí me interesaba, claro que me interesaba escucharla. Si hasta me daban ganas de felicitarla, de abrazarla, de alentarla…

"Mis hijas van a estar casi terminando la secundaria cuando yo tenga esa edad", pensaba, "y ella recién empieza".

Hubiera podido seguir escuchándola, sin cansarme. Nunca me cansan esas historias. 

Pero ella prefirió seguir paseando. Seguir disfrutando con su bebé, de los últimos rayos de sol de ese viernes de otoño. 

Y lo bien que hizo…




14 comentarios

  1. Qué hermosa entrada!! Me emocionó... divina la imagen!!!

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  2. Que lindo relato, se me apretó el corazón :)... Un abrazo!

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    1. A mí también! Por eso quise compartirlo con uds.
      Besotes.

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  3. Ooohh! qué post tan tierno, hasta yo me he quedado con las ganas de seguir escuchando. Precioso post.... Un besazo!

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  4. wow , que hermosa experiencia, ser mamá a cualquier edad es lo mejor, obviamente cada etapa es diferente, a los 46 yo voy tener una hija que este pisando los 30 !

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  5. Mil gracias. Me encanta que me visitéis desde tan lejos!
    Me emocionó tu relato. Ser madre a esa edad debe ser diferente. Una maternidad más... no sé cómo llamarlo... Serena? Sin duda es algo fabuloso a cualquier edad!
    Muaaa

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  6. Me emocionó mucho.... tb soy mamá "grande" (tuve mi primer bebe a los 36)y es una experiencia hermosa, serena...

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  7. wow que lindo relato... es increible la fuerza que te dan estos chiquititos para superarte, de querer ser mas, para una y para ellos... :) Beso

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    1. A mí me emocionó verla derrochando tanta energía y amor!

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