En esta casa las clases se declaran oficialmente comenzadas cuando comienzan para "la mayor", o sea hoy.
"La menor" arrancó el lunes, pero la primaria es otra historia. Una cree que es complicada hasta que pasa a la próxima instancia y se encuentra con catorce materias, jornadas extensas y pedidos de ayuda para estudiar cosas como por ejemplo "reinos fungi, monera y protista", temas que yo más que en biología pondría en la sección de chino básico.
Temas que, mientras tomo la lección, no dejo de sorprenderme y maravillarme de todo lo que esa cabecita de catorce años es capaz de memorizar, y me pregunto internamente cuándo podrá usar todos esos conocimientos.
Ella, que se pregunta lo mismo pero a diferencia de mí lo grita a los cuatro vientos, intenta hacer uso y abuso de esas palabras que dichas en voz alta suenan como si hubiera hecho un Master en Neurociencia. Entonces aprovecha y a quien quiera oirla le informa que en la heladera hay "reino fungi", léase champignones.
Y es que claro, si ambas sabemos que tanta terminología complicada no va a poder ser retenida hasta más allá del verano, por lo menos aprovechémosla ahora para mandarnos la parte.
Bueno, así que acá andamos, comenzando las clases... ¡¡¡¡¡Buaaaaaaaaaa!!!!!
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