Andrea Franco
Cuando mi
hija menor me contó sobre la existencia de esta cuenta, mi primera reacción fue
reírme. Me pareció absolutamente ridículo pensar que alguien, quien quiera que
fuese, pudiera desperdiciar su tiempo criticando fotos de personas desconocidas y, por si fuera poco,
también se dedicara a subirlas a Instagram.
Me pareció
absolutamente ridículo que encima, la muy descarada, se atreviera a presumir de
brindar un servicio. Porque según parece, a eso justamente se dedicaba, a decir
maldades a cualquiera como si estuviera haciendo una especie de favor. “Si sos
fea… te lo decimos”, se jactaba la muy pilla.
Y claro, mi
primera reacción fue reírme, qué otra cosa podía hacer ante esta niña tan
resentida, tan disparatadamente maliciosa. Pero cuando la imaginé ideando esta
cuenta, la verdad es que también sentí un
poquitín de lástima por ella. Porque mientras mi hija y sus amigas se divertían
sacándose fotos, subiéndolas y escribiéndose piropos mutuamente, ésta otra se divertía
lastimando.
“¡Subí fotos
tuyas, a ver si sos linda!”, le puso alguna, ofendida. “¡Compráte una vida!”,
le puso otra, más rencorosa. Y una tercera fue mucho más allá: “Lo que estás
haciendo podría considerarse bullying, ya te denuncié y te van a cerrar la
cuenta”. Y ahí nomás se acabó el “juego”… si es que alguien estaba jugando.
En esta edad tan
especial en que están creciendo, en que la imagen es sumamente importante, en que lo que les devuelven tanto el
espejo como los demás es fundamental, que alguien se dedique a decir cosas feas
y odiosas puede atentar contra el amor propio de cualquiera.
Y a mí, una
vez acabado el asunto, igual me quedó dando vueltas durante unos cuantos días esa
frase: “Si sos fea… te lo decimos”. Me quedó dando vueltas, porque me pregunto
quién podría andar necesitando que le estén cantando ese tipo de atrocidades en
la cara.
Ya lo
sabemos, no es ninguna novedad que las mamás solemos ser un tanto exageradas y sobre todo muy poco
objetivas… nuestros hijos son los más hermosos del mundo y que nadie se atreva
a contradecirnos. Por eso, me pareció tan original como absurdo que alguien, desde
tan temprana edad, se dedicara a tratar de borrar eso que tan cuidadosamente y
con tanto esmero formamos en casa: la autoestima.
“¡Te queda hermoso!”. “¡Te va a ir super bien!”.
“¡Estás muy linda!”… Esas palabras llenas de aliento que tienen el don de
generarles seguridad y confianza. Esas palabras que, imagino que esta niña, anda necesitando escuchar.
Auchh eso duele! Cuando el mundo se volvió tan cruel y en que momento dejamos que eso pasara? Sera que justificamos desde temprana edad su falta de filtros sociales con la excusa, mas trillada del siglo, es una etapa? Me dejaste seca. Y un poco dolida de que de adolescencia no allá mejorado ni un ápice desde que pase por esa etapa.
ResponderEliminarNi siquiera creo que fuera adolescente, Sabri. La descubrieron mi hija y unas amigas cuando dejó un comentario en una foto. Lo más loco es que encima tenía algunos seguidores.Debe haber miles rondando en las redes y otros tantos afuera. En fin...
EliminarHoy 25 de Mayo (plante un zapallo) jaja no eso no, hoy 25 de mayo te quiero desear un muy feliz cumple! de esos que te sorprenden y te regalan cosas linas y utiles y no un par de medias o un monedero feo de plastico, que hayas comido rico, que hayas brindado, y que hayas pedido tres deseos cerrando los ojos bien fuerte y que se cumplan pronto! feliz cumple y feliz todo el resto de tu anio a vivirlo a pleno!!!!!
ResponderEliminarMuchísimas gracias!!!! Esas son las mejores sorpresas que nos brinda la blogósfera... conocer gente linda, aunque sea a la distancia.
EliminarBesotes! <3
Y ahora si mi comentario respecto al post "Solo hay un chico lindo en el mundo y cada mama lo tiene"...
ResponderEliminarMe encantoooooó!!!
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